domingo, 27 de junio de 2010

"De la instantánea a la descomposición del movimiento no había más que un paso"

En 1844, Daguerre anunció que podía registrar caballos al galope y pájaros volando. En 1851, Talbot, con ayuda de una luz intensa, detuvo el movimiento de un disco con una página del Times pegada encima, de manera que ésta podía leerse sin problema, pero lo cierto es que atrapar el movimiento no fue posible hasta tres décadas después, pues estas experiencias no trascendieron fuera de laboratorio, dando un paso demasiado importante en la historia de la fotografía ya que se dio pie para un nuevo estilo: el de capturar el movimiento dentro de imagénes donde se “congelan” momentos, siendo este un efecto pionero en la historia y considerado el con más carácter.
El término fotodinamismo futurista nace en 1911 gracias a los hermanos Anton Giulio y Arthur Bragaglia, consta principalmente en mostrar o dar la sensación de que los sujetos fotografiados están en constante movimiento, es que, como apunta M. Loup Sougez "de la instantánea a la descomposición del movimiento no había más que un paso". Ciertamente, pudiéndose recoger el movimiento congelado en una instantánea, no había más que continuar la serie para recogerlo en sus fases consecutivas. Al principio, este nuevo efecto fotográfico nació por un defecto del soporte, pero una vez descubierto éste mismo y la técnica para capturar estos instantes, se comenzó a practicar y a reconocer como una vanguardia más dentro de las nacientes del siglo XX.
Este trabajo consta de una muestra de cinco fotografías, consideradas la mejores dentro de varias sesiones realizadas en distintos días, obteniendo los resultados esperados al momento de la toma. Para poder llevarlas a cabo, busqué distintos referentes de este estilo, siendo considerados los mejores los mismos hermanos Bragaglia ya que considero, que aparte de lo nuevo que era el fotografiar el movimiento, que eran más retratos experimentales porque con sus fotos y la técnica utilizada crean cosas totalmente nuevas, situaciones más que estéticas que provocan sensaciones, más bien una reacción dentro del público. Me gusta esa nitidez incompleta de los personajes, producida por el movimiento, no podían estar 100% nitidez, menos sus estelas, lo que nos hace saber que el movimiento existe, también me llama mucho la atención, que en sus imágenes no hay movimientos sugeridos, como lo son comúnmente las fotos de este estilo hoy día, ellos utilizaban efectos congelados pero que por su posición y reiteradas repeticiones nos dan cuenta de que el sujeto no está estático.
Ahora bien, para yo realizar las tomas pensadas, tuve que adecuarme a las herramientas que poseía debido a los avances tecnológicos desde el comienzo de la vanguardia hasta los tiempos de hoy día. Generalmente entonces utilicé un soporte digital, espere a que fuese de noche para que no existiese ningún tipo de filtración de luz en la sala oscura donde me encontraba, en ella nuevamente me asegure que no existiera ninguna luz que pudiese arruinar la obra. Situé al modelo donde consideraba que era necesario. El diafragma utilizado es más bien cerrado, un f22 para que la luz que iba a entrar no fuera tan de golpe y entrase de forma más pausada. Para iluminar utilicé linternas y una unidad de flash portátil, sólo que quería que apareciera en la toma lo iluminaba. La primera aparición del personaje era iluminado con flash para que se quedará mas éstatico en la imagen. Las otras apariciones que son también congeladas pero el resultado da la sensación de movimiento fueron iluminadas con linternas, ya que ésta al no poseer una potencia tan intensa provocaba que en resultado final lo iluminado se mostrara más tenue que la aparición original. EL tiempo de obturación se mantuvo siempre en bulbo, ya que estas tomas requieren de un tiempo prolongado por la oscuridad del ambiente y para poder iluminar bien a los sujetos, sobre todo si se hace con linterna. Así no se pierden dentro de la escena y nos dan esta magnífica sensación. El tiempo total que se demoraba cada imagen en realizarse era alrededor de los dos minutos, un tiempo bastante largo. Debo decir también que en algunos casos, como las fotos son todas en color, de pronto el color se opacaba por la oscuridad que había en los alrededores, y para obtener una mejor imagen las retoqué en los programas de edición Lightroom y Photoshop para recuperar los colores que había perdido.
Me pareció bastante interesante el proceso para llegar a estos resultados, no fueron coincidencias, son puestas en escenas pensadas con anterioridad, con cada detalle fríamente calculado y obviamente con muchas pruebas antes de poder empezar con la toma pensada. Si elegí esta vanguardia y no otra es porque principalmente me encantó la idea de romper con lo establecido, en este caso, a principios del siglo XX , y a pesar de las distintas evoluciones estéticas de la imagen, se estaba acostumbrado a ver imágenes estáticas, el sujeto perfectamente nítido y sin siquiera pensar en algún tipo de desenfoque producido por movimiento y no como recurso fotográfico. Cuando entra el fotodinamismo, causó en la gente una gran reacción al ser algo totalmente nuevo, nadie nunca pensó que se podía capturar el movimiento en sí, menos llegar incluso a pensar en cómo el personaje debía moverse para ser retratado, este tipo de juego entre sujeto y cámara, dando también un toque de más realidad en la imagen ya que en nuestras vidas, nunca estamos estáticos como posando a una cámara que nos sigue a todas partes, sino todo lo contario, estamos en constante movimiento, y qué mejor manera de mostrarlo con el fotodinamismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario